En aquel tiempo, Juan dijo a Jesús: «Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre y se lo hemos prohibido, porque no es de nuestro grupo.»
Jesús replicó: «No se lo prohibáis, porque nadie que haga un milagro en mi nombre puede luego hablar mal de mí. Pues el que no está contra nosotros está a favor nuestro. Os aseguro que el que os dé a beber un vaso de agua porque sois del Mesías no quedará sin recompensa. Al que sea ocasión de pecado para uno de estos pequeños que creen en mí, más le valdría que le colgaran del cuello una piedra de molino y lo echaran al mar. Y si tu mano es ocasión de pecado para ti, córtatela. Más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos al fuego eterno que no se extingue. Y si tu pie es ocasión de pecado para ti, córtatelo. Más te vale entrar cojo en la vida, que ser arrojado con los dos pies al fuego eterno. Y si tu ojo es ocasión de pecado para ti, sácatelo. Más te vale entrar tuerto en el reino de Dios que ser arrojado con los dos ojos al fuego eterno, donde el gusano no muere y el fuego no se extingue.»
Palabra del Señor
¡Ya estamos de vuelta! Este curso comenzamos ante por la visita pastoral de nuestro Obispo auxiliar D. Santiago Gómez Sierra.
Todavía hay parte de la comunidad con su descanso estival, pero entre Javi y los que estamos de vuelta, le daremos una bienvenida acogedora en nombre de toda la comunidad parroquial.
Los cristianos debemos ser profetas en medio del mundo para ayudar a descubrir donde están las huellas de Dios. Para ello, contamos con un proyecto salvífico de amor y de justicia que debemos dar a conocer.
Cuando leemos la palabra milagro, rápidamente pensamos en algo fácil, pero el milagro nunca es fácil, es la transformación de la persona cuando descubre el mensaje liberador de Dios.
Dios siempre actúa en la historia y tambien en las personas, pero no siempre estamos abiertos para percibirlo porque nos dejamos llevar por otras realidades o simplemente tenemos una fe endeble.
Cualquier acto o gesto que hagamos con amor es un signo de amor cristiano, por tanto, estamos haciendo visible su plan de salvación para todos.
El evangelista también nos advierte del peligro de escandalizar o difamar porque eso va en contra de la dignidad del hermano.
Seamos cristianos que con nuestro comportamiento demos ejemplo de justicia, paz y amor.
Buena semana a todos.