Claves para quererte más

• Cada día se nos presentan oportunidades para afianzar nuestra autoestima. Para saber aprovecharlas, tenemos que asumir estas pautas.

  Aprender a defender nuestra opinión. Nos pasamos gran parte de nuestra vida tratando de agradar a los demás. Bien, ya ha llegado el momento de no hacerlo, porque no siempre podemos agradar a todos. Lo importante es lo que  opinamos sobre nosotros mismos. Habrá quien coincida y quien no; por lo tanto tenemos aprender a defender nuestras convicciones.

  Asumir el control de nuestra vida. Llega en nuestra adultez el momento de hacernos responsable de lo que nos sucede, sea agradable o no. No dejemos que otras personas resuelvan nuestro presente, ni nuestro futuro. Hay veces que por comodidad dejamos de asumirlo.  Toma conciencia de que tú eres quien tiene que decidir en cada momento tus actos.

  Cuidemos la comunicación. En la actualidad las telecomunicaciones han avanzado muchisimo y esto quizás se un problema a la hora de comunicarnos.  Cada vez a las personas nos cuesta más expresar nuestras emociones, sentimientos y esto genera resentimientos que al no salir daña nuestro interior, hace que nos separemos y distanciemos de seres queridos y amigos.

  Cada día expresa lo que sientes. Cuando nuestra autoestima esta bien encauzada, actuamos respentado nuestros sentimientos, emociones y necesidades. Aprendamos a decir «no», a tiempo sin sentirnos culpable y «si», cuando lo deseemos. El respeto hacia nosotros y nuestras convicciones son importantes para nosotros.

  Derecho a equivocarnos. Todos tenemos derecho de equivocarnos. Para ser experto en alguna materia hay que ser primero aprendiz y poco a poco llegar a maestro. Para ello, lo importante es tener ánimo, asumir los errores y aprender de ellos, el crecimiento personal pasa por «caer y levantarnos».

  Tenemos que ser indulgentes. La vida es un camino de aprendizaje, si lo tomámos así nuestro crecimiento personal será cada día más positivo y seremos más felices. Practiquemos con nosotros la indulgencia, la benevolencia y aprendamos a querernos. Es bueno que sepamos halagarnos cuando tenemos un triunfo y animarnos cuando las cosas no son como queremos que sean.

  Si nos trabajamos cada día nos querremos un poquito más.