15/11/2008 22:18:04
El Evangelio de hoy quizás nos plantee dudas, porque enseguida entendemos por “talento” dinero, economía, ya que el talento era una moneda utilizada por griegos y romanos. Al leerlo parece que nos está llevando a nuestro presente, competir por competir, ganar, poseer, tener … Que los pobres sigan siendo pobres.
Podríamos hacer otra lectura, la palabra talento también se refiere a la
capacidad para actuar de forma inteligente, ser responsables de los valores que nos han sido dados para hacer del mundo el hogar de todos.
Un hogar donde se de la justicia, se practique la caridad y se vive el amor y la fraternidad. Todos estos valores nos ayudarán a compartir en lugar de competir.
Cuando compartimos, somos justos y demostramos que somos hijos de Dios, pero cuando abusamos, aplastamos y nos olvidamos de los demás ponemos en su lugar al dios dinero.
Todos los que formamos la Iglesia llevamos mucho tiempo poniendo nuestro esfuerzo, nuestro tiempo y también parte de nuestros bienes para que el mundo avance en humanidad y también en ecología.
Tenemos que dar gracias a Dios por esos talentos que ha puesto en cada uno de nosotros y el poder que nos ha dado para poder multiplicarlos.
Bueno sería pensar ¿Qué talento poseo y como multiplicarlo?
¡Sean felices y disfruten el talento con que han sido bendecidos!
Locus serenitatis 